quinta-feira, 16 de julho de 2009

Zelaya Insta Insurreição em Honduras

El gobierno de facto de Roberto Micheletti adoptó las primeras medidas económicas para hacer frente a la crisis en Honduras, mientras el depuesto presidente Manuel Zelaya instó a los hondureños a la “insurrección” para forzar su restitución en el poder.

Consciente de que el tiempo apremia después de más de dos semanas en el exilio, y que su rival, Roberto Micheletti, ya está instalado en el poder, con el gobierno prácticamente formado, Zelaya instó a los hondureños a la “insurrección”.

“La insurrección es un derecho legítimo (...) frente a un gobierno usurpador y de militares golpistas”, afirmó Zelaya en rueda de prensa en Guatemala, adonde llegó el martes procedente de Nicaragua.

Zelaya incitó a sus compatriotas a la “la huelga, la manifestación, las tomas, la desobediencia civil” hasta que los “golpistas salgan del régimen de facto que han establecido en nuestro país”.

El presidente depuesto tiene ahora depositadas sus esperanzas de volver a Tegucigalpa en la negociación que se reanuda este sábado en Costa Rica con la mediación del presidente Oscar Arias. Pero nada parece indicar que Micheletti, designado presidente por el Congreso Nacional tras el golpe, vaya a retirarse.

“El gobierno tiene el control completo del territorio”, avisó la víspera el canciller Carlos López, uno de los cuatro negociadores de la delegación de Micheletti, quien recomendó a Zelaya y a su delegación que se “carguen de paciencia” en la negociación, la misma que ha pedido el propio Arias.

Pocos en Honduras, con excepción de los sindicatos y los movimientos sociales de izquierda, desean el regreso de Zelaya al poder.

Mientras Zelaya da la vuelta a Centroamérica y viaja a Estados Unidos para recabar apoyos, el gobierno de Micheletti adoptó la víspera las primeras medidas de tipo económico en su primer consejo de ministros, destinadas a capear la crisis en que se encuentra el país.

El presupuesto para el 2009, que el gobierno de Zelaya debió haber presentado hace 10 meses, será de 112.938 millones de lempiras (5.600 millones de dólares), lo que supone una reducción de 8,2% con respecto a 2008, así como “una disminución del gasto corriente del 10% del gobierno central y un 20% de las instituciones descentralizadas”, según anunció la nueva titular de Finanzas Gabriela Núñez.

“Se reducirán los gastos en compra de vehículos, viáticos, compra de combustible, publicidad y todo gasto innecesario”, señaló la ministra quien aseguró que las entidades financieras internacionales no han suspendido los fondos externos ni los países la cooperación con Honduras.
Mientras trata de dar señales de normalidad a el país, que amaneció este miércoles sin toque de queda por segundo día consecutivo.

Micheletti ha tenido que hacer frente a la primera baja de su gobierno con la dimisión de Enrique Ortez de la cartera de Gobernación después que había hecho otro tanto de la cancillería.
Ortez, que había dicho del presidente estadounidense Barack Obama que es un “negrito que no sabe dónde está Tegucigalpa”, ha tomado la decisión de retirarse para “no causar daño al gobierno de nuestro amigo Roberto Micheletti”, según declaró en su carta de renuncia.

no Diario Las Americas

Conspiração

Informes a los que tuvo acceso EL HERALDO revelan que en el país está en marcha una conspiración gestada desde Caracas por el presidente y ex militar golpista Hugo Chávez.

La conspiración pretende desestabilizar el país mediante acciones armadas de grupos irregulares, ligados al narcotráfico o provenientes de Nicaragua, según estos informes.

Como parte del plan chavista, se pretende la toma del aeropuerto Toncontín, bloqueo de las principales carreteras, paralizar instituciones públicas y hospitales y fabricar una masacre durante enfrentamientos inducidos contra policías y militares.

La orden, que habría sido girada por militares infiltrados chavistas y sandinistas en el país, es atentar contra negocios, destruir medios de comunicación, quemar vehículos y cometer actos de vandalismo, obligando así al uso de la fuerza militar y policial.

Un capitán naval venezolano de apellido Rodríguez (demás nombres se mantienen en reserva), es quien coordina la rebelión para los días viernes y sábado. La operación militar intervencionista terminaría con la toma de Toncontín, según confesó a EL HERALDO una fuente de entero crédito.

El “plan Chávez” contempla que sean miembros de pandillas, a quienes se pagó entre 300 y 500 lempiras, los que encabecen las manifestaciones.

Su misión será sublevarse a la autoridad hasta la provocación de disparos.

Una vez surjan los primeros disparos, los grupos irregulares infiltrados dispararán contra los mismos manifestantes, con el fin de fabricar una masacre que desestabilice y provoque una anarquía en el país.

Magnicidio
Pero la conspiración, según fuentes a las que tuvo acceso EL HERALDO, va más allá.

Se ha confirmado que en Colón, Gracias a Dios y Olancho se han conformado células armadas que intentarán ingresar a Manuel Zelaya Rosales.

Se ha definido como un punto probable La Mosquitia hondureña, por ser una zona inhóspita, con poco control policial y dominada por los carteles de la droga. Una banda que domina el mercado de la droga en Colón y otros sectores del litoral estarían colaborando en la operación.

Efectivos inmiscuidos en labores de inteligencia y contrainteligencia afirman que el plan es que Zelaya entre al país custodiado por grupos irregulares.

Sin embargo, advierten que no hay garantías de que Zelaya, al pasar de objetivo político a militar, sea víctima de una conspiración.

Ayer se confirmó que en Cilín, Colón, se ha detectado la presencia de al menos 100 hombres armados.

Las declaraciones de Zelaya, en el sentido de llamar a la insurrección al pueblo serían parte del “plan Chávez”, aunque Zelaya podría desconocer los alcances de toda la operación subversiva planeada en Caracas y que se podría ejecutar desde Nicaragua.

Chávez ya hizo el primer intento por fabricar una masacre el pasado 5 de julio, cuando ordenó a miles de manifestantes a invadir la pista.
Ese día, Chávez confesó que dirigía la operación militar y que estuvo en contacto con los manifestantes durante todo el recorrido hasta llegar a Toncontín.

Zelaya sobrevoló la pista, sin embargo, no pudo aterrizar por los obstáculos que puso la Fuerza Armada hondureña.

El presidente depuesto no hizo intentos por aterrizar en otras pistas del país, donde no había manifestantes. Desde el avión, pidió a la población invadir la pista, lo que indujo los enfrentamientos con militares y policías. El saldo: un muerto.

Finalmente, la operación militar denominada “enjambre de abejas” fracasó, ya que según el mensaje escrito en la pizarra de la oficina que ocupaba Chávez, el objetivo era provocar muertos, heridos y desesperación en las personas.

* Objetivos:
- Masacre. Chávez buscará, desde hoy hasta el sábado, una masacre de manifestantes.
- Vandalismo. Pandilleros han sido contratados para delinquir.
- Toncontín. Se pretende la toma del aeropuerto.

Comento:
Eis como agem os membros do Foro de São Paulo. Seus planos de dominação têm que ser efetivados nem que seja à bala!

É claro que alguns "simpatizantas" do proto-ditador vão gritar: mentira! É tudo invenção da direita!

É. Pode até ser. Afinal, muitos congressistas hondurenhos estiveram em contato com Chávez, desde que aprovaram a entrada de Honduras na tal ALBA. Devem ter aprendido como mentir com ele, que sempre fala em golpe contra seu governo e em magnicídio (Evo aprendeu direitinho, não é mesmo, cambada?)

Mas vamos aos fatos: Chávez já havia ameaçado, claramente, logo no começo da crise hondurenha, invadir Honduras com suas Forças Armadas caso não houvesse o reempossamento do "companheiro" Zelaya. Já vimos que ele tentou fazer um "
enxame de abelhas" para desestabilizar o governo interino.

Este plano é, com certeza, parte das "
outras medidas" que Zelaya disse que "tomariam quando deram seu ultimato", no dia 13 de Julho.

Que o povo hondurenho siga fotalecido em seu propósito de garantir a verdadeira democracia no país. E que os olhos do mundo - e principalmente dos brasileiros - se voltem para lá e aprendam como se faz para enxotar a canalha comunista, que só quer que sejamos obedientes autômatos em prol do seu (deles) enriquecimento.

segunda-feira, 13 de julho de 2009

Nicaragua Também Diz Não ao Foro de São Paulo

El opositor Partido Liberal Constitucionalista (PLC) de Nicaragua reafirmó en su convención el compromiso de rechazar la posibilidad de cualquier reforma a la Constitución del país que permita la reelección del presidente Daniel Ortega.

El PLC, que dirige el ex gobernante nicaragüense Arnoldo Alemán (1997-2002), ratificó por aclamación de los 1.900 convencionales su rechazo a las reformas constitucionales y al cambio del sistema de Gobierno de presidencialista por uno parlamentario, como pretende el Ejecutivo.
“Hemos decidido oponernos rotundamente a la reelección (presidencial) sucesiva o a la reelección por tercera vez por cualquier persona que ha sido Presidente por dos veces”, señaló a Efe el secretario general del PLC y diputado opositor, Francisco Aguirre Sacasa.

Aguirre Sacasa, canciller durante la Administración de Alemán, agregó que la convención también ordenó a los legisladores liberales a oponerse “a cualquier cambio de Gobierno de presidencialista a parlamentario”.

“Es un compromiso nuestro. No es negociable”, sostuvo el político liberal.
El presidente Ortega confirmó su interés de reformar la Constitución para establecer la reelección presidencial indefinida, que abiertamente persigue, y cambiar el sistema político presidencialista a uno parlamentario.

La Constitución de Nicaragua prohíbe la reelección presidencial consecutiva, pero no la alterna.
Las reformas constitucionales en Nicaragua deben ser aprobadas en dos legislaturas y con al menos dos tercios de los 92 diputados que integran la Asamblea Nacional, cifra que no alcanzan los sandinistas y sus aliados, que reúnen al menos a 47.

Los sandinistas y los liberales iniciaron negociaciones para reformar la Carta Magna, incluida la reelección presidencial, en octubre de 2007, pero las “congelaron” luego de los comicios municipales de noviembre pasado, ganados ampliamente por el oficialismo y que la oposición denunció como fraudulentos.

En la convención, los liberales hicieron un pronunciamiento en el que aseguran que “Nicaragua peligra después de dos años de desgobierno de Daniel Ortega y (su esposa) Rosario Murillo”.
Según los liberales, con el Gobierno de Ortega, que asumió el poder en enero de 2007, el país vive una “profunda crisis económica y social, y un ataque frontal a la democracia representativa”.
Denunciaron que el líder sandinista abandonó todo pretexto de seguir en el sendero de la democracia, de la reconciliación y la reconstrucción económica y que, en su lugar, ofrece la democracia directa y participativa.

Dicha democracia, agregaron, es igual “al opio del Socialismo del Siglo XXI” que promueve el gobernante venezolano, Hugo Chávez, “que no es más que una cortina de humo para perpetuar en el poder a una dinastía familiar vitalicia al peor estilo del pasado”.

Durante la convención, los liberales ratificaron la “urgente” necesidad de buscar la unidad de todos los partidos “democráticos”, divididos en la actualidad en distintas facciones, incluido con el Partido Liberal Independiente (PLI), al que pertenece el líder opositor y legislador liberal disidente Eduardo Montealegre.

El ex presidente Alemán, en su discurso, recalcó la necesidad de la unidad de las “fuerzas democráticas” para derrotar al gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en los comicios de 2011 y propuso celebrar primarias para escoger a candidatos de consenso.

“Cuando los demócratas se unen alrededor del PLC, ganan, y cuando van divididos, que es la estrategia fundamental del ‘danielismo’, pierden”, opinó Alemán. A la convención liberal acudieron representantes de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), del Movimiento Vamos con Eduardo aliado del PLI, del Partido Conservador (PC) y pequeños partidos.

no Diario Las Americas

Comento:
Dentre os muitos participantes do Foro de São Paulo, Hugo Chávez, o bufão venezuelano que gosta de se imiscuir nos assuntos internos de outras nações - também conhecido como INGERÊNCIA -, é o que mais deve estar pulando de raiva ao ver que as pessoas não mais estão caindo na conversa fiada da "democracia esquerdista".

A Corte Suprema de Honduras já depôs Zelaya por estar tentando o mesmo golpe de Estado contra o povo e a Constituição hondurenha e, agora, os oposicionistas nicaraguenses optam por não seguir em frente com o delírios comunistas dos integrantes do Foro de São Paulo.

Como eu sempre disse - e bem o disse, também Aguirre Sacasa -, este "socialismo do século XXI" promovido por Chávez e pelos demais membros do Foro "nada mais é do que uma cortina de fumaça para pérpetuar no poder uma dinastia familiar no pior estilo do passado", como o faz, há 50 anos, Fidel Castro, co-fundador, junto com Lula, do famigerado Foro.

Esta tática, de solapar a democracia fingindo respeitá-la, está presente em todas as ações dos membros do Foro. E todos, sem exceção, procuram perpetuar-se no poder em seus respectivos países.

Esta mostra, tanto dos hondurenhos quanto dos nicaraguenses, de que ainda há pessoas que respeitam verdadeiramente a democracia é mais um duro golpe nos desígnios de Cuba e dos esquerdistas de formar a União das Repúblicas Socialistas da América Latina, a "Pátria Grande" tão cantada pelos membros daquela entidade.

Por isto,
Fidel escreveu um artigo dizendo estar apreensivo quanto aos possíveis "golpes" fomentados pelos "direitistas" - na verdade, rechaços aos desmandos e delírios esquerdistas de perpetuação no poder.

É hora do povo e dos representantes legais de outras nações começarem a expulsar de seus governos este lixo imoral representado pelos esquerdistas e seus delírios gregários de transformar os indivíduos em autômatos presos num gulag, como são, até hoje, os povos cubano e norte-coreano.

Morre o Golpe ou Morrem as Constituições

O ex-presidente cubano Fidel Castro afirmou em novo artigo que a América Latina corre o risco de ser assolada por uma onda de golpes de Estado militares se o presidente de Honduras deposto, Manuel Zelaya, não for restituído.

Em sua coluna publicada na noite de sexta-feira, 10, Fidel disse que, dependendo do resultado da crise política hondurenha, líderes militares direitistas treinados pelos EUA poderiam voltar suas armas contra os governos.

"Se o presidente Manuel Zelaya não foi reintegrado ao cargo, uma onda de golpes de Estado ameaça varrer muitos governos da América Latina, que estará à mercê dos militares de extrema direita, educados com a doutrina de segurança da Escola das Américas", escreveu Fidel em mais uma de sua Reflexões, intitulada "Morre o golpe ou morrem as Constituições".

O líder cubano refere-se à escola militar americana responsável pelo treinamento de milhares de soldados e oficiais latino-americanos. Fidel reforça o argumento usado por Zelaya de que é um "direito dos povos da América Latina eleger os seus governantes", e por isso o presidente deposto deveria ser reconduzido ao cargo.

O líder cubano afirma ainda que Washington pressionou Zelaya para negociar um "humilhante perdão" pelas ilegalidades que é acusado pelo governo golpista, e que o país está "ocupado pelas Forças Armadas dos EUA", que possuem uma base militar no local.

No artigo, Fidel assegura que enquanto o presidente americano, Barack Obama, declarava que o único presidente constitucional de Honduras é Zelaya, "em Washington, a extrema direita manobrava para que [Zelaya] negociasse um humilhante perdão". "Era óbvio que tal ato significaria entre os seus e no mundo o seu desaparecimento da cena política".

(...)

no Estado de São Paulo.

Comento:
Ah! Este é o medo deles: que haja uma onda de "golpes" que defenda a verdadeira democracia em cada país onde os membros comuno-esquerdistas do Foro de São Paulo são governantes e faça com que seus desejos de formar a "Pátria Grande" comunista sejam interrompidos.

Ademais, quem é Fidel para falar em "direito dos povos da América Latina eleger os seus governantes"?

Ele sempre governou com mãos de ferro a ilha caribenha e nunca permitiu, nos 50 anos em que foi ditador, uma eleição verdadeiramente democrática, já que em Cuba somente existe um partido político - e sempre houve 662 políticos inscritos para as "eleições" a fim de preencherem as 662 cadeiras do Congresso.

Se Fidel - e os demais governantes que falam em "golpe" - respeitassem verdadeiramente a democracia e a Constituição hondurenha, saberiam que é proibida em cláusula pétrea qualquer tentativa de modificar o modelo eleitoral naquele país, e que, por isso, Zelaya perdeu, automaticamente, seus direitos políticos, como bem podemos verificar no artigo 239 da Constituição hondurenha, que diz que "o cidadão que tenha desempenhado a titularidade do Poder Executivo não poderá ser Presidente ou Designado. Aquele que ofender esta disposição ou propuser sua reforma, bem como aqueles que a apóiem direta ou indiretamente, terão cessados de imediato o desempenho de seus respectivos cargos e ficarão inabilitados por dez anos para o exercício de toda função pública".

No Título VII, "Da Reforma e da Inviolabilidade da Constituição", Capítulo I, "Da Reforma da Constituição", o artigo 374 prescreve a cláusula pétrea da impossibilidade de reeleição nos seguintes termos: "Não se poderá reformar, em nenhum caso, o artigo anterior [ trata da reforma da constituição ], o presente artigo, os artigos constitucionais que se referem à forma de governo, ao território nacional, ao prazo do mandato presidencial, à proibição para ser novamente Presidente da República, o cidadão que o tenha exercido a qualquer título e o referente àqueles que não podem ser Presidentes da República no período subseqüente."


Aqui está evidente a cláusula pétrea que proíbe a reeleição de Presidente da República.

O artigo 4º é de clareza solar ao definir, constitucionalmente, o delito contra a alternância do poder: "A forma de governo é republicana, democrática e representativa. É exercido por três poderes: Legislativo, Executivo e Judiciário, complementares e independentes e sem subordinação. A alternância no exercício da Presidência da República é obrigatória. A infração desta norma constitui delito de traição à Pátria."

Embora Zelaya não tenha infringido esta norma, queria e precisava alterá-la, e, para tanto, tentou o golpe sob a forma de um referendo popular para modificá-la - no que foi detido pelos militares a mando da Corte Suprema.

No Capítulo III, "Dos Cidadãos", o artigo 4º estabelece: "A qualidade de cidadão perde-se: (...) 5. Por incitar, promover ou apoiar o continuísmo ou a reeleição do Presidente da República;".

Por outro lado, o artigo 238 arrola os requisitos necessários para ser Presidente do seguinte modo: "Para ser Presidente ou Designado à Presidência, requer-se: (...) 3. Estar no gozo dos direitos de cidadão;".

Aqui, uma enorme dificuldade constitucional para Zelaya. Talvez a maior blindagem contra a reeleição. A prova do fato, no caso, notório, de conhecimento geral de que promovia e lutava por seu próprio continuísmo, faz perder a cidadania, um dos requisitos essenciais não só para assumir o cargo, mas também para manter-se como Presidente da República.

O artigo 245 esclarece "o Presidente da República detém a administração geral do Estado: são suas atribuições: 1. Cumprir e fazer cumprir a Constituição, os tratados e convenções, leis e demais disposições legais". (...) "16. Exercer o comando em Chefe das Forças Armadas em seu caráter de Comandante Geral, e adotar as medidas necessárias para a defesa da República;".

No Capítulo X, "Das Forças Armadas", o artigo 272 dispõe que "As Forças Armadas de Honduras são uma Instituição Nacional de caráter permanente, essencialmente profissional, apolítica, obediente e não deliberante. São constituídas para defender a integridade territorial e a soberania da República, manter a paz, a ordem pública e o império da Constituição, os princípios do livre sufrágio e a alternância no exercício da Presidência da República."

Note-se que o Presidente é o comandante supremo das Forças Armadas. Estas devem obediência ao Chefe de Estado, na medida em que este obedeça a Constituição e, no caso, esta obriga expressamente que as Forças Armadas defenda a alternância do exercício da Presidência da República. No momento em que o presidente pretende a permanência por meio da reeleição, descumprindo as normas constitucionais e decisões da Corte Suprema de Justiça de Honduras, a ordem de prisão emanada por este Tribunal haveria de ser cumprida.

Os fatos e o conjunto das disposições constitucionais citadas mostram que, em Honduras, não houve golpe de Estado. Hans Kelsen ensinava que o golpe de Estado "instaura novo ordenamento jurídico, dado que a violação do ordenamento precedente implica também na mudança da sua norma fundamental e, por conseguinte, na invalidação de todas as leis e disposições emanadas em nome dela". Trata-se de poder de fato a impor-se contra a ordem jurídica em vigor, instituindo novo ordenamento.

Em Honduras, o modelo comunista do ex-presidente Zelaya - apoiado pelo "socialismo do século XXI" do bolivariano Hugo Chávez - foi repelido graças a uma Constituição fortemente aramada contra a tentação do continuísmo e do caudilhismo latino-americano. Lá se evitou o golpe e se defendeu a Constituição e a lei - e, portanto, a verdadeira democracia, coisa que Fidel e os demais membros do Foro de São Paulo, não respeitam em hipótese alguma!

Assim, o título que Fidel deu a seu artigo ("Morre o Golpe ou Morrem as Constituições") é profundamente verdadeiro, mas, como tudo o que os esquerdistas fazem, é pelos motivos errados.

Zelaya era o golpista. A Suprema Corte, na defesa de sua democracia e da Constituição do país, o depôs. Se Zelaya voltar, como querem seus apoiadores, morrerá a Constituição e a democracia de Honduras.

quarta-feira, 8 de julho de 2009


Quebrando o Script?

A reação dos governos latino-americanos e de Washington à deposição do presidente hondurenho Manuel Zelaya – ignorando maciçamente o fato de que foi Zelaya quem agiu fora da lei, ao insistir numa manobra obscura para promover um referendo considerado ilegal – parece confirmar que os movimentos políticos na América Latina estão interligados, num esquema previamente traçado e onde nenhum tipo de distúrbio pode acontecer. Isso comprovaria uma das principais teses contidas numa pesquisa da qual tenho participado e que tem como objetivo estudar a organização de extrema esquerda latino-americana Foro de São Paulo (FSP), tentando descobrir até que ponto esse organismo influencia a política do continente.

O FSP funciona como uma "base de retaguarda", onde as esquerdas radicais discutem seus objetivos, modus operandi e podem se refugiar quando estão fora do poder, inclusive se retroalimentando de slogans e discursos radicais, necessários para animar a militância do baixo clero – sequiosa por ouvir sobre as "injustiças do capitalismo" e como é possível criar uma "alternativa socialista para a globalização dominante no século 21", além de ser um núcleo de onde as esquerdas radicais têm retirado elementos para participar do jogo político e social.

Entretanto, a reação aos acontecimentos que levaram à deposição de Manuel Zelaya reforça uma outra impressão: a de que o FSP não é a principal força motora do avanço das esquerdas na América Latina, onde vários países, incluindo o Brasil, são governados por partidos ligados a essa organização.

O mais correto seria afirmar que quem dá as cartas do jogo são elites internacionalistas, sobretudo norte-americanas, que se utilizam de elementos do FSP para seus objetivos.

Uma dessas organizações internacionalistas é o Diálogo Interamericano, que há décadas busca promover políticas que favoreçam a "democratização, estabilidade e prosperidade" do continente. E, para que isso seja atingido, um fator parece ser o de maior importância: que os grupos políticos devam chegar ao poder e controlá-lo pela via eleitoral. Ou seja: uma abordagem teoricamente muito positiva para um continente marcado por guerrilhas, terrorismo e regimes de força.

Na prática, contudo, o que tem sido visto é que forças de esquerda acabam se tornando a única ou pelo menos a principal alternativa eleitoral. E, não raro, esses governos são formados por quadros de antigas organizações guerrilheiras marxistas ou elementos de índole claramente autoritária, que num passado não muito distante pregavam exatamente a destruição da democracia.

Isso é notório na Venezuela, onde Hugo Chávez tentou um golpe de Estado quando ainda era oficial do exército; na Nicarágua, onde o atual presidente, Daniel Ortega, sempre teve relação íntima com as ditaduras soviética e cubana, tendo sido ele próprio ditador na década de 1980; e em El-Salvador, onde a FMLN, após mais de uma década de sangrenta guerra civil, passou a disputar as eleições que sempre combateu, para citar alguns exemplos. A neutralização eleitoral de políticos descolados deste perfil tem sido uma constante desde então, além da manutenção e estímulo à agenda de organizações não-governamentais e paraestatais de esquerda.

Também não parece ser mera coincidência que se multiplique a seguinte situação: tão logo chegue ao poder e surjam as condições adequadas, um político ligado ao FSP se mobiliza para realizar um referendo que avalize agendas políticas e/ou sociais defendidas pela extrema esquerda, cujos resultados, por sua vez, são legitimados por organizações estrangeiras ligadas direta ou indiretamente aos interesses internacionalistas. Foi assim na Venezuela, no Equador e Bolívia. Mesmo no Brasil, situações como o referendo sobre o desarmamento e a recorrente idéia de um novo mandato para o presidente Lula (ele próprio um homem de destaque no FSP) encaixam-se neste perfil.

Tais referendos, onde massas de manobra cooptadas pelo poder estatal podem facilmente ser utilizadas para direcionar resultados, têm servido com variados graus de intensidade para legitimar o fortalecimento do Estado, que passa a exercer um maior controle dos meios de produção, estimula aparatos de violência diversificados, elimina os canais de liberdade de expressão ou os reduz a quase impotência – além de investir maciçamente em propaganda, contra-informação e agentes de influência internacionais, com os regimes envolvidos nessa operação se autolegitimando e protegendo.

Aparentemente, a manutenção desse quadro é interessante para os grupos internacionais com os quais as esquerdas latino-americanas possuem ligações, porque são as esquerdas quem melhor podem atender a agenda desses grupos. Não cabe detalhar aqui quais são os pontos desta agenda, mas incluem itens como controle populacional, desarmamento e políticas econômicas baseadas no aumento da presença estatal.

Assim, o retrospecto da América Latina desde o começo da década de 1990 demonstra que uma estabilidade política forçada foi alcançada, tendo um tipo de panaceia eleitoral, onde as eleições são um fim em si mesmo, como legitimador de todo o processo.

Os governos de Jean Bertrand Aristide, no Haiti, e do próprio Hugo Chávez, foram alvo de movimentos militares inicialmente bem sucedidos que tiveram de voltar atrás e reempossar os líderes depostos. Alberto Fujimori foi tolerado durante anos no Peru após dar um golpe de Estado, mas isso quase certamente foi devido à necessidade de se conseguir um mínimo de estabilidade para o país, assolado por violentos movimentos terroristas. Tão logo foi atingido o objetivo, Fujimori saiu de cena e hoje está numa prisão. Por outro lado, quem pode dizer o mesmo de um Daniel Ortega ou Hugo Chávez –- para não falar do patrono do FSP, o velho ditador Fidel Castro – levando à inevitável pergunta: dentre os motivos que explicam a longevidade e mutação dos regimes/organizações de esquerda está incluído o fato de que oferecem resultados mais interessantes para alguém?

Portanto, não seria nenhuma surpresa se ocorresse uma reviravolta e Zelaya retornasse ao poder – mesmo tendo cometido uma série irregularidades e tenha sido deposto por um movimento legítimo, em defesa da própria Constituição – porque há um script previamente combinado difícil de ser quebrado e que afirma basicamente o seguinte:

Se um governante de esquerda é eleito, pode fazer o que achar melhor – inclusive abrir as portas para uma ditadura – bastando que tudo seja feito dentro de uma suposta legalidade.

Se uma reviravolta acontecer em Honduras, resta saber o efeito que terá em outros países, como El Salvador, e mesmo no Brasil, às voltas com um processo eleitoral em que a ideia de um terceiro mandato é um segredo de polichinelo.

por Paulo Zamboni, no Diário do Comércio em 02/07/2009

Socialismo Latino-Americano


Comento:
Não. A disposição dos três de forma a lembrar os carrascos comunistas não foi mera coincidência. Este é o "socialismo do século XXI", as garras do Foro de São Paulo, que se abatem sobre Honduras que depôs um presidente que queria aviltar a Constituição e deturpar a democracia daquele país, apoiado que era pelo proto-ditador venezuelano.

terça-feira, 7 de julho de 2009

Qual o Medo Deles?

Por que a canalha latino-americana grita tanto contra o que chama “golpe” em Honduras, quando resta evidente que Manuel Zelaya é que tentava golpear as instituições? Teme-se o óbvio: o efeito cascata. Como o próprio Lula exclamou: “Imaginem se vira moda!”

Pois é. Imaginem se as forças políticas - em associação com os militares, sim - começarem a botar para correr os vagabundos que solapam a democracia para, supostamente, democratizar os países. Pela ordem: Chávez, Rafael Correa, Evo Morales e Daniel Ortega deveriam ter tido o mesmo destino que hoje tem Zelaya. Mais: o chavismo está levando sua “revolução” para o Peru. No Paraguai, Fernando Lugo, companheiro de Ortega em molestamento infantil, ensaia passos ainda tímidos, mas reais, no golpe de inspiração bolivariana.

E, aqui, meus caros, é importante considerar que esses líderes se aproveitam de um momento em que, com efeito, as forças militares do continente, antes fiadoras das chamadas “elites tradicionais”, decidiram, em regra, se profissionalizar. Contentam-se, felizmente, em ser guardiãs da Constituição - o que, na prática, são em todos os países democráticos.

Ora, não é segredo para ninguém que a América Latina foi infelicitada pelas, vá lá, elites historicamente corruptas. Mas será que o melhor método de combatê-las é o chavismo? Quer dizer que as “elites historicamente corruptas” serão substituídas por uma nova elite corrupta, que ainda pretende fazer história, é isso? De certo modo, com outros métodos, o mesmo processo está em curso no Brasil. As oligarquias tradicionais se juntaram aos novos oligarcas, que seqüestraram, pela via eleitoral, o aparelho de estado. Quando Lula chegou ao poder, encontrou instituições sólidas. O PT bem que tentou e tenta enfraquecê-las. Hoje, elas são menos saudáveis do que antes. Mas ainda não há espaço para o golpismo. Por enquanto ao menos.

Barack Fidel Che Obama nada tem a dizer. Seu suposto respeito à democracia, secundado pela diplomacia de Hillary Clinton, não passa, na aparência, de uma concepção cartorial; na essência, é só má consciência e, incrivelmente, rendição aos inimigos dos EUA. Na América Latina, tenta emular com o chavismo, mas adotando-lhe parte do discurso, em vez de confrontá-lo. No Oriente Médio, sua fala está sempre interessada, oh!!!, em amansar os radicais. Ontem, ganhou o noticiário do mundo ao reduzir, em parceria com a Rússia, o arsenal nuclear. A redução é inócua, mas rende dividendos para a sua biografia em favor da paz… A Rússia, diga-se, não tem nenhum problema com sua “área de influência” e deixou isso muito claro na Geórgia. A Rússia não tem Barack Hussein; tem Putin.

O problema da reação de Honduras à tentativa de golpe de Zelaya é que, com efeito, há certo potencial para “virar moda”: vai que outros vagabundos queiram adotar a democracia bolivariana, e os militares os ponham para correr, não é mesmo?

Honduras incomoda porque foi o primeiro país a denunciar, com resistência ativa, o método chavista. E o fez sem pedir permissão para Barack Hussein. Até porque Barack Hussein não daria. Ele está ocupado em construir a sua biografia de progressista, inclusivo e amigo da paz. Mais uma ditadurazinha de esquerda não faria diferença. Ao contrário até. Talvez ajudasse a construir sua fama de tolerante.

O problema desse rapaz é que ele pretende ser aceito e adotado pelo inimigo. Só se consegue isso fazendo as suas (do inimigo) vontades. E Barack Hussein faz.

por Reinaldo Azevedo

sexta-feira, 3 de julho de 2009

Honduras Diz Não ao Foro de São Paulo

A um dia do fim do ultimato dado pela OEA (Organização dos Estados Americanos) ao governo interino de Honduras, o secretário-geral da entidade, José Miguel Insulza, desembarca hoje em Tegucigalpa com a difícil missão de viabilizar a volta do presidente deposto, Manuel Zelaya.

“Não vamos a Honduras negociar. Vamos a Honduras solicitar que mudem o que eles estão fazendo”, disse Insulza, durante visita à Guiana. “Farei tudo o que posso, mas acho que será muito difícil mudar o rumo das coisas em dois dias.”

Anteontem, a Assembleia Geral da OEA deu um ultimato de 72 horas a Honduras para que restitua Zelaya ao poder de forma “imediata, segura e incondicional”, sob pena de o país ser suspenso do grupo.

Embora a pressão internacional contra o presidente interino, Roberto Micheletti, aumente a cada dia, seu governo vem mantendo o discurso de que a volta de Zelaya não está na mesa. Desde a deposição, no último domingo, essa posição tem o respaldo do Judiciário, do Congresso, do Ministério Público e do alto comando das Forças Armadas.

Em entrevista à Folha ontem, a vice-chanceler do governo interino de Honduras, Martha Lorena Alvarado, disse que “tudo é negociável com a OEA, menos a volta de Zelaya”.

À tarde, Micheletti disse que a comissão da OEA será “bem-vinda”, mas disse que, a princípio, ele não se reunirá com Insulza. “Tenho entendido que falarão com a Promotoria, com a Corte Suprema de Justiça. Sou a última parte. Mas vamos recebê-lo como o que somos, um governo constitucional”, disse, em entrevista coletiva na Casa Presidencial.

“Estamos já planejando um disquete para enviar a todo o mundo uma cronologia do que aconteceu desde o primeiro dia desses acontecimentos”, afirmou Micheletti, ao ser questionado sobre como estava se preparando para receber Insulza.

Questionado se estaria de acordo em antecipar eleições presidenciais, Micheletti disse que “totalmente, se essa for uma maneira de solucionar esse tipo de problema”.

O governo interino manteve para o dia 29 de novembro a realização de eleições parlamentares, presidenciais e municipais.

por Fabiano Maisonnave, na Folha

Comento:
Zelaya era presidente de Honduras. Originalmente eleito por uma coalizão de centro-direita em uma acirrada disputa em 2005, conseguiu aprovar, em 2008, a entrada daquele país na ALBA (ALternativa Bolivariana para as Américas) no ano passado.

Desde então, parece que Zelaya começou a sofrer, devido à aproximação com o candidato a ditador Hugo Chávez, delírios Castrista e quis modificar a Constituição de seu país para que houvesse reeleição e pudesse perpetuar-se no poder, tal qual o próprio Chávez fez na Venezuela - seguido por Correa e Evo Morales.

A crise política em Honduras se agravou a partir de março deste ano, quando o ex-presidente Manuel Zelaya apresentou uma proposta para realizar um plebiscito sobre a criação de uma assembleia constituinte que permitisse a reeleição presidencial.

Neste referendo, Zelaya dizia que a mudança constitucional era necessária para fazer as mudanças que Honduras necessita para se desenvolver. E entre as mudanças estava a reeleição para presidente. Porém, segundo a atual Carta Magna do país, promulgada em 1984, o mandato único do presidente da república é uma cláusula pétrea e não pode ser alterada.

Com esta proposta, Zelaya, que já governava com minoria no Congresso, que é unicameral, perdeu apoio até dentro do próprio partido (Partido Liberal) e a Suprema Corte, que é apontada pelo Legislativo, também se posicionou contra a realização do referendo.

Zelaya também tem uma relação difícil com os meios de comunicação. Em seus delírios chavistas de grandeza, Zelaya obrigou por decreto, em 2007, rádios e televisões a exibirem duas horas de propaganda do governo, por julgar que a cobertura dos grandes veículos era tendenciosa.

Na última semana, porém, a tensão entre o Executivo e os demais poderes e o Exército cresceu. O plano do presidente foi considerado ilegal pelo Congresso e pela Justiça, por ferir a Constituição vigente. Em 23/06/2009, o Congresso aprovou uma lei que proíbe a realização de referendos ou plebiscitos 180 dias antes ou depois de eleições gerais, o que impossibilitaria os planos do presidente. Em seguida, o chefe do Exército, general Romeo Vasquez, disse que não ajudaria na organização do referendo para não desrespeitar a lei.

Líderes militares se recusaram a entregar urnas para a votação, uma decisão que levou à demissão do general Vasquez e à renúncia do ministro da Defesa, Edmundo Orellana. Os chefes da Marinha e da Aeronáutica também renunciaram em protesto.

Na quinta-feira, o presidente e seus simpatizantes entraram em uma base militar e retiraram as urnas que estavam guardadas lá. O Exército, por sua vez, colocou centenas de soldados nas ruas da capital, a fim de prevenir que os aliados do presidente causassem confusão.

No sábado, o presidente ignorou uma decisão da Suprema Corte para devolver o cargo ao chefe do Exército. "Nós não vamos obedecer a Suprema Corte", disse o presidente a uma multidão de simpatizantes em frente à sede do governo. "A corte, que apenas faz justiça aos poderosos, ricos e banqueiros, só causa problemas para a democracia."

Pausa:
Zelaya nasceu em 20 de setembro de 1952, em uma família de madeireiros e fazendeiros de Olancho, no oeste do país. Chegou a cursar engenharia civil, mas abandonou os estudos para se dedicar ao trabalho nas terras da família. Foi presidente de uma associação de industriais madeireiros e do conselho hondurenho de empresas privadas. Foi também diretor de um banco, mantendo-se em contato com a cúpula do empresariado de seu país.

Voltando:
No domingo, militares, a pedido da Suprema Corte, invadiram o palácio presidencial, prenderam Zelaya, ainda de pijama, em seu dormitório e o colocaram num avião para a Costa Rica. À noite, o Congresso leu uma carta atribuída ao presidente na qual ele renunciava, o que foi desmentido por ele, e o destituiu do cargo, nomeando Roberto Micheletti, líder do Congresso, como novo presidente do país, conforme exige a Constituição.

A Constituição de Honduras estabelece que: "ARTICULO 239.- El ciudadano que haya desempeñado la titularidad del Poder Ejecutivo no podrá ser Presidente o Vicepresidente de la República. El que quebrante esta disposición o proponga su reforma, así como aquellos que lo apoyen directa o indirectamente, cesarán de inmediato en el desempeño de sus respectivos cargos y quedarán inhabilitados por diez (10) años para el ejercicio de toda función pública."


Trata-se da Constituição de um país historicamente traumatizado por ditaduras e ditadores. Que põe na Constituição uma defesa contra aventuras continuístas. E Manuel Zelaya PROCUROU, COM SEU REFERENDO, GOLPEAR A CONSTITUIÇÃO E A DEMOCRACIA HONDURENHAS. Ou seja, as ações ilegais do ex-Presidente de honduras, ao tentar realizar um plebiscito inconstitucional, ACARRETARAM SUA DESTITUIÇÃO AUTOMÁTICA DO CARGO!

Mesmo assim, diante dos acontecimentos, praticamente o mundo inteiro tem condenado o "golpe militar" que depôs Zelaya, incluindo-se, aí, o "império" norte-americano, na figura do presidente Hussein - o qual, muitos como o próprio Chávez, ainda condenam como sendo os verdadeiros interessados no "golpe militar".

Chávez, que influenciou profundamente Zelaya, agora, está fazendo um grande bloqueio econômico a Honduras - justamente ele, que, como os outros membros do Foro de São Paulo, sempre condenou o embargo econômico que os EUA mantinham em relação a Cuba. Logicamente, bem sabe Chávez, o governo hondurenho é, politicamente, de centro-direita. Fosse de esquerda, nada haveria. Pelo contrário, seria fartamente apoiado - inclusive com as Forças Armadas venezuelanas aportando em Honduras para garantir a apoio ao novo presidente.

Mas Honduras vai resistir à pressão? A resposta é uma só: já resistiu. Manuel Zelaya e Hugo Chávez, que é o verdadeiro pilar da crise que vive o país, já não lograram o seu intento, ainda que Zelaya volte e conclua o seu mandato, como quer a OEA e a ONU.

E somente voltará com um acordo com o governo provisório e as forças que o apóiam — praticamente, o país inteiro. A reforma da Constituição, como ele queria, dificilmente seria feita. E isso quer dizer que o golpe de Chávez, em Honduras, falhou. Na verdade, não é a primeira vez que dá errado - no Peru, ele quebrou a cara, mas foi ainda durante o processo eleitoral, apesar de que, agora, por intermédio de Evo Morales, tenta criar uma
convulsão indígena no país.

As lideranças políticas e os militares impediram o golpe de estado de Zelaya impuseram, também por intermédio do uso legítimo da força, a ordem constitucional. Medidas de restrição à liberdade que estão em curso foram aprovadas no Congresso por unanimidade. Zelaya não tem um mísero aliado de peso no país - nem mesmo no seu partido. Veja abaixo o que segue na Folha de São Paulo:

Até domingo assessor do presidente deposto Manuel Zelaya para projetos especiais, Moisés Starkman ocupa, assim como vários outros membros do alto escalão hondurenho, o mesmo cargo no governo interino de Roberto Micheletti. Nesta entrevista à Folha, Starkman afirma que Zelaya não tinha apoio para mudar a Constituição e que a influência do governo do venezuelano Hugo Chávez prejudica o país:

FOLHA - Há condições para a OEA (Organização dos Estados Americanos) negociar a volta de Zelaya a Honduras?

MOISÉS STARKMAN - Não creio que esse processo tenha começado ainda. Uma coisa é fazer contato, outra coisa é negociar. Mas surpreende que o secretário-geral da OEA [José Miguel Insulza, que chega hoje ao país] não tenha visitado Honduras antes para fazer uma missão de avaliação sobre o que efetivamente estava ocorrendo.

FOLHA - O senhor permaneceu no governo Zelaya até o final. Havia de fato a influência do presidente Hugo Chávez?
STARKMAN - Isso é muito difícil de medir, mas é evidente que havia uma aproximação cada vez maior em direção ao governo venezuelano. O que começou como uma aproximação comercial, com a Alba [Alternativa Bolivariana para as Américas, bloco liderado por Chávez ao qual Honduras se filiou no ano passado], foi adquirindo outro tipo de relação.

FOLHA - Qual era a intenção de Zelaya ao tentar convocar uma Assembleia Constituinte?
STARKMAN - Zelaya manifestou, em várias ocasiões, a necessidade de mudar a Constituição. Agora, em Honduras, tivemos o maior período de paz e de democracia com a Constituição atual. É uma Carta em vigência desde 1984 e, desde então, temos eleição a cada quatro anos. É uma Constituição que deu estabilidade ao nosso país. A Constituição tem artigos que não podem ser mudados. E um deles se refere à forma do governo, ao período presidencial e à não reeleição. Em Honduras, a ausência de reeleição tem sido um dos elementos que vêm dando estabilidade até o presente.

FOLHA - Chávez é a grande ameaça para Honduras, como alega o presidente interino?
STARKMAN - Chávez vem dando várias declarações infelizes. Isso faz com que haja temor em Honduras de que se queira exportar uma forma de governo que pode ser boa para a Venezuela. Mas nós, em Honduras, queremos uma forma de governo própria. Pessoalmente, acho importante que em Honduras haja um sistema de pesos e contrapesos. Não gostaria que, em Honduras, haja um presidente que faça o que quiser e quando quiser.